Cuidado,
mis besos son bombas;
yo mato corazones
y dejo a los hombres
sin razones
para volver a amar.
Y es por eso
que ninguno ha vuelto;
es muy difícil volver a empezar,
o incluso cruzar
las líneas no marcadas
donde caen mis palabras
que penetran como espadas.
Pero aquí no cabe la preocupación;
algún día vendrá
un hombre de gran corazón
con una armadura que resista
impactos de cañón
y me hará creer
en el mundo otra vez.
lunes, 16 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me encanta <3
ResponderEliminarGracias. :)
ResponderEliminar